Dos osas pardas asesinadas el domingo 29 de noviembre en las provincias de Palencia y Huesca. Los investigados, cazadores cuya identidad no se ha hecho pública, se enfrentan a varios delitos contra la fauna y flora silvestre.
Se trata de una especie en peligro de extinción en España. Desde el Gobierno estatal no se plantean prohibir la caza tras el caso de las osas pardas asesinadas y se han iniciado movilizaciones en redes sociales en rechazo a este tipo de prácticas.
Es un caso que nos recuerda en ciertos aspectos a la osa asesinada con su hijo por subirse a un submarino, que también fue justificado por las autoridades locales de la zona.
Las osas pardas asesinadas vivían en Palencia y Huesca
Una de las osas pardas asesinadas, encontrada en el paraje de Ventanilla (Palencia) fue abatida durante una cacería legal llevada a cabo en una reserva regional. Esta fue autorizada aun estando la movilidad social restringida por la situación pandémica actual.
El sospechoso es un vecino de Velilla del Río Carrión, según recoge La Vanguardia.
El cazador asegura que fue una muerte «accidental». Aún así, el caso fue remitido al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Cervera de Pisuerga. Tal y como aseguran las autoridades, el cadáver fue trasladado al centro de recuperación de animales silvestres de Burgos.

La osa Sarousse, asesinada en Huesca, fue liberada en Francia en 2006
En el caso de la osa parda Sarousse, uno de los cazadores aseguró haber realizado hasta tres disparos «en defensa propia», según el Gobierno aragonés. Los perros que llevaban asustaron a Sarousse y esta comenzó a acercase. Tras gritar y ver que no se alejaba, disparó el arma.
Sarousse tenía 21 años y fue liberada en Francia en el año 2006. Cuatro años más tarde, se trasladó hasta la vertiente aragonesa donde estos cazadores le arrebataron la vida en el municipio de Valle de Bardají (Ribagorza).
Desde el Gobierno español no manifiestan señas de querer prohibir la caza tras este caso de dos osas pardas asesinadas. La Ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, anunció acciones legales para compatibilizar la biodiversidad y la caza.
Las acciones legales en estos casos se han iniciado gracias a la Fundación Oso Pardo (FOP). Solicitaron a las fiscalías superiores de Castilla León y Aragón que ordenen el inicio urgente de las diligencias de la investigación.

Cuánto cuesta matar a un oso pardo en España
El artículo 40 de la Ley 33/2015, de 21 de septiembre, en relación al Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial, recoge que el oso pardo (Ursus arctos) se encuentra actualmente en peligro de extinción en España.
Por su parte, el artículo 334 del Código Penal, recoge que «será castigado con la pena de prisión de seis meses a dos años o multa de ocho a veinticuatro meses y, en todo caso, inhabilitación especial para profesión u oficio e inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de cazar o pescar por tiempo de dos a cuatro años…»
También detalla que la pena se impondrá en su mitad superior si se trata de especies o subespecies catalogadas en peligro de extinción, como es el caso de las osas pardas.
Por parte de determinados sectores del veganismo y asociaciones de protección animal, se han iniciado movilizaciones en redes sociales con campañas bajo los lemas #NoALaCaza, #LaVerdadDeLaCaza #ElNegocioDeLaCaza.